En el mundo contable, la auditaría financiera es indispensable para determinar y evaluar la situación económica de una empresa y, basándonos en los resultados, implementar la toma de decisiones gerenciales acertadas para garantizar su estabilidad y progreso. Para ello, te contamos los pasos a seguir para que esta evaluación financiera sea exitosa.
1. Planificación a base de riesgos
Debe implementar planes basados en el supuesto de que algo pueda salir mal. De este modo, se anticipa a las posibles contingencias a las que se pueda enfrentar una empresa y así saber cómo responder de forma oportuna.
Es importante establecer el alcance y los objetivos de la auditaría financiera . Para ello, se realiza un esquema general de la situación contable de la empresa, los controles internos y las estrategias establecidas por la organización. Esto permitirá al auditor sentar las bases sobre el programa de auditaría que efectuará.
Durante esta fase se recopila toda la información necesaria para poder definir la estrategia a emplear.
2. Ejecución de trabajo
Durante esta fase se aplican todas las pruebas que fueron planificadas por el profesional encargado. Se aplican procedimientos que se establecen en los programas de auditaría con el fin de ubicar la evidencia que sustenta el informe que posteriormente se emitirá.
Es importante resaltar que se debe mantener la comunicación con los miembros de la empresa durante todo el proceso con la finalidad de aclarar dudas en caso de que alguna información recopilada sea ambigua.
Además, la comunicación permitirá hacer correcciones mínimas en algunos procesos antes de emitir el resultado final del estudio.
Los elementos que se deben incluir en la fase de ejecución del trabajo son los siguientes:
- Pruebas de auditaría.
- Técnicas y procedimientos implementados.
- Papeles de trabajo.
- Recopilación de evidencias.
- Resultados de las técnicas aplicadas.
3. Conclusión de auditaría
Esta fase se compone de la comunicación de los resultados obtenidos de todas las pruebas realizadas por el auditor. Dichos resultados deben estar debidamente soportados por toda la evidencia encontrada, la cual debe ser suficiente y veraz.
El auditor debe elaborar un informe que contiene las observaciones y recomendaciones que deben seguir las empresas. Puesto que se trata de recomendaciones, la decisión final la tomará la junta directiva, con relación a lo que se hará para corregir los problemas encontrados.
Un informe de auditaría debe contener los siguientes elementos, toma nota:
- La carta del dictamen.
- Los estados financieros que fueron objeto de estudio.
- Notas aclaratorias con base en las evidencias encontradas.
- Información financiera complementaria.
- Observaciones y recomendaciones sobre el correcto procedimiento a futuro, el cual debe ser sencillo y claro.
4. Informar y archivar
El profesional debe presentar el informe y explicar todas las consideraciones que debe tener en cuenta a entidad a quien audita. Todo el estudio debe ser archivado, con la finalidad de que la gerencia pueda utilizar la información presentada para la futura toma de decisiones.
Además, guardar los resultados de este análisis permitirá que en el siguiente proceso de auditaría se pueda evaluar si se tomaron en cuenta las recomendaciones presentadas en la evaluación anterior. Es una manera de determinar las mejoras que hace la organización en el área financiera.
5. Toma de decisiones
Aunque este punto corresponde particularmente a la gerencia administrativa, esta se efectuará con base en los resultados obtenidos y presentados en el informe de auditaría. Las decisiones que tome la empresa se pueden implementar a pequeño, mediano y largo plazo.
Todas las empresas necesitan poner en marcha un proceso de auditaría de estados financieros no solo para conocer el estatus económico de una organización, sino para implementar correctivos en caso de encontrar fallas en los procedimientos. Esperamos que esta información te haya resultado útil.